jueves, 8 de abril de 2010

Los siete saberes necesarios para la educación del futuro

La educación es un aspecto esencial para el desarrollo de una sociedad, por ello requiere toda la atención e importancia para que esta esté siempre a la vanguardia respondiendo a las necesidades actuales de cada época, pues justamente junto con la familia es quien forma y prepara a los individuos a enfrentar la realidad.
Por lo que en esta ocasión se hace una síntesis del texto: Los siete saberes necesarios para la educación del futuro; que desde el punto de vista de Edgar Morín, se mencionan características muy esenciales que abarcan contenidos actitudinales que permitirán a la educando a las necesidades que van surgiendo. Es decir, pretende exponer problemas centrales o fundamentales que permanecen por completo ignorados y que son necesarios para la futura educación, destapando profundos misterios concernientes al universo, a la vida, al nacimiento del ser humano.
La educación tiende a comunicar los conocimientos, pero permanece ciega ante lo que es el conocimiento humano, despreocupándose en absoluto por hacer conocer lo que es conocer. El conocimiento del conocimiento debe aparecer como una necesidad primera que serviría de preparación para afrontar riesgos permanentes de error y de ilusión que no cesan de parasitar la mente humana. Al introducir y desarrollar en la educación el estudio de las características cerebrales, de las disposiciones tanto psíquicas como culturales permiten arriesgar el error o la ilusión.
Asimismo, la supremacía de un conocimiento fragmentado según las disciplinas impide a menudo operar el vínculo entre las partes y las totalidades, por lo que debe haber interdisciplinariedad y transversalidad de las materias. De igual forma, revisar y reconocer las características individuales que desarrollo, para con ello fortalecer la aptitud natural de la inteligencia humana para ubicar todas sus informaciones en un contexto y en su conjunto y con ello saber hacer uso del conocimiento.
Respecto a enseñar la condición humana, es reconocer la unidad compleja de la naturaleza humana la que está completamente desintegrada en la educación, a través de las disciplinas y que imposibilita aprender lo que significa ser humano. La condición humana debería ser objeto esencial de cualquier educación.
De la misma manera la identidad terrenal debe convertirse en objeto de la educación, ya que es pertinente enseñar la historia de la era planetaria y mostrar cómo se volvieron intersolidarias todas las partes del mundo. Esto nos llevaría a que también la educación debería comprender la enseñanza de las incertidumbres, enseñar principios de estrategia que permitan afrontar los riesgos, los inesperado, lo incierto y modificar su desarrollo en virtud de las informaciones adquiridas en el camino; es decir, preparar nuestras mentes para esperar lo inesperado y poder afrontarlo.
Para lo anterior, indudablemente se necesita que el ser humano comprenda, y esto tendrá también que ser enseñado, pues la comprensión es la mismo tiempo medio y fin de la comunicación humana y la educación para la comprensión está ausente de nuestras enseñanzas. El desarrollo de la comprensión necesita una reforma de las mentalidades; Tal debe ser la tarea para la educación del futuro: la comprensión mutua entre humanos.
Finalmente, es necesario reconocer que se es individuo y se pertenece a una sociedad y a una especie, a eso se refiere la ética del ser humano, ésta debe formarse en las mentes a partir de la conciencia de que el humano es al mismo tiempo individuo, parte de una sociedad, parte de una especie, para poder establecer una relación de control mutuo por medio de la democracia, y tener así una humanidad como comunidad planetaria.
Fuente: Morín, Edgar. Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. http://www.bibliotecasvirtuales.com/biblioteca/Articulos/lossietesaberes/prologo.asp